Entre dos amores…. Entre dos naciones.
“siento muchas cosas al mismo tiempo… alegría y sobre todo nostalgia” es la expresión de muchos inmigrantes que viven en nuestro país y están casados/as con dominicanos/as.
La inmigración se da por varios motivos, sean políticos, económicos por trabajo entre otros. Uno de los más comunes es por amor… personas de países diferentes que se conocen, se enamoran y se casan. Una de las mayores decisiones es dónde van a vivir y sin importan el país donde residirán uno de los miembros será inmigrante. Al aproximarse las fechas navideñas esto genera un sentimiento de nostalgia hacia la familia de origen y costumbres del país de origen.
Muchas son las personas que residen en nuestra amada media isla y al estar casados/as con ciudadanos dominicanos/as sus “almas” están divididas como muchos de ellos y ellas expresan. Aman a sus parejas e hijos pero extrañan sus costumbres, comidas, rituales y hasta el clima de su país de origen.
Pueden llegar a cursar trastornos del estado de ánimo como la depresión cuando no se cuenta con la adecuada red de apoyo. Asumir a la familia política como si fuera la familia de origen es complicado en muchas ocasiones sobre todo cuando quien emigra se siente en todo momento como un extranjero y le incomoda estar con otras personas a menos que no sea la pareja. Pues al asumir dicha familia en ocasiones sienten como si estuvieran “traicionando o renunciando” a la familia de origen.
No es fácil ser inmigrante y sobre todo no poder ir país de origen pues no se cuenta con los recursos económicos suficientes para hacer dicho viaje o la situación política lo vuelve peligroso. La sensación de no ser entendidos es muy frustrante para muchos de los inmigrantes que residen en nuestro país. La nostalgia se torna constante, así como la ambivalencia. Entre el placer y el agradecimiento por un nuevo comienzo y el dolor de la historia dejada atrás.
Mientras que los dominicanos migrantes también experimentan ansiedad sobre todo cuando están solos sin familia y lejos de casa. El ritual de noche buena se vuelve un dolor emocional que solo encuentra consuelo en los videos llamadas que pueden hacer y en las anécdotas que pueden contar a las personas con quien viven o donde trabajan.
Navidad pasa de ser una época dulce, tierna y alegre a ser una época muy difícil para los que están lejos de casa. Renombrar ese nuevo espacio como “hogar” les cuesta pues desea tener tanto a la familia actual como a la familia de origen cerca. Re simbolizar no debe significar renunciar o abandonar a la familia de origen más bien es una forma de honrar el pasado creando nuevos rituales en la familia actual.
Navidad y año nuevo se vuelven para algunos se vuelve un dolor muy difícil de sobrellevar si no se cuenta con una red de apoyo que los acompañe. La familia sanguínea no podrá ser sustituida pero la familia electiva llamada amigos puede ser de vital importancia para celebrar las navidades y re aprender a celebrar la misma con un nuevo tipo de familia.
Heidy Camilo Hilario
Terapeuta sexual y de pareja
Foto de: mundohispanico.com