Del dolor a la creación
Las flores, el vestido de novia, el traje del novio, el cortejo nupcial, la música, el banquete y las flores, se vuelven amargos y bellos recuerdos luego de una separación. La ilusión, fantasía y esperanza con la que se forma una relación de pareja se convierten en rabia, tristeza y dolor al firmar el divorcio.
Cierto es que ninguna relación inicia con la visión de terminar el vínculo, toda relación se proyecta como un proyecto de vida donde se ve el futuro en común y con metas cumplidas disfrutando de los frutos de una vida en común.
Pero en lamentables ocasiones dicho plan no funciona y la empresa relacional termina por distintas razones, que van desde violencia hacia la pareja hasta infidelidad pasando por comunicación ineficaz o simplemente se murió el amor.
Las separaciones de pareja son duelos pues muere un proyecto de vida, no solo la separación de la persona amada, sino también de todo lo que simbolizaba esa unión, los amigos en común, casa, familia de origen de la hoy ex pareja, entre otros.
Los duelos son difíciles, se viven y se expresan desde la personalidad de quien los vive. Las etapas del duelo son varias y no funciona de manea literal, esto significa que la primera etapa es la negación, ira, negociación, depresión y aceptación. Los sentimientos que se encuentran una gama muy interesante que pueden ir desde la euforia de la una supuesta aceptación hasta la más profunda de las angustias en la etapa de la depresión.
No se puede asumir que todos van a cursar un duelo de igual manera o que la misma persona afrontara los duelos de la misma forma en todo momento. En estos momentos la persona no necesita que le juzguen sino que le comprensión.
Utilizar la creatividad para afrontar el duelo es una estrategia terapéutica, sea el arte, la música o actividades profesionales. Lo importante es reconocer que se tiene el derecho a la expresión del dolor siempre que no cause daños a otros o a sí mismo, el proceso del tiempo del duelo por separación va depender que tan compleja y extensa sea el proceso legal y social de desvinculación, pues no se puede pretender que alguien que 1 años después de dejar la casa pero que aún están en temas legales ya tenga completamente superado el duelo, algunas personas si lo pueden hacer otras no, por eso el respeto a los tempos.
Es vital reconocer cuando un proceso de duelo se complica, esto puede ser porque no se avanza en las etapas o aún se tienen conflictos con la ex pareja, buscar asistencia psicoterapéutica, pues la persona puede cursar una depresión compleja.
Imagen: madreshoy.com
